jueves, marzo 02, 2006

Las mujeres y el trabajo!!!

Vaya, vaya, estaba leyendo algunos datos históricos sobre la incursión de la mujer en el trabajo y las estadísticas están de miedo, ha sido muy rápido nuestro crecimiento y ni que decir de todas las trabas que los hombres han puesto, pero creo que eso es de todos conocido.

Lo que si me molesta, quizá porque afortunadamente todavía no es mi realidad, son esas ideas que todavía prevalecen... como por ejemplo: "Es el que solo la mujer que labora fuera de casa trabaja". Pero lo peor es que esta idea no es exclusiva de los hombres sino de algunas mujeres.

He de decir que desconozco el rol de ser esposa y madre, pero admiro a quienes además son proveedoras en sus hogares con el fruto de su tabajo. Digo, yo con el trabajo tengo para caer rendida a diario.

Sorprendida quede cuando supe que a principios del siglo XX en algunos paises latinoamericanos las leyes establecían que era necesario el consentimiento del esposo antes de que una mujer pudiera celebrar un contrato laboral. Queriendo ver esto del lado positivo podemos pensar que era para proteger a la mujer.

Eso era a principios del siglo XX pero que me dicen de México a finales del siglo XX que no tiene mucho que termino, que en algunas maquiladoras en la frontera norte se obligaba (u obliga, no se si todavía) a las empleadas a que muestren su toalla sanitaria a la supervisora para demostrar que no se han embarazado.

Es muy frecuente en la actualidad, que en oficinas públicas y privadas (sobretodo bancos) se solicite como requisito de puestos la comprobación de no embarazo, o bien que no se pueda embarazar la mujer hasta después de los seis meses (si bien te fue) de haber ingresado a laborar, de lo contrario te despiden. Como sucedio con una amiga a la que despidieron a penas supieron que se casó.

Si antes las mujeres podían darse el lujo de considerar sus empleos como un ingreso adicional al presupuesto familiar hoy más del 64% asegura que su ingreso representa la mitad o más de los ingresos del hogar. Además hoy ya luchamos por representar el 50% de la fuerza laboral en el mundo.

Aunque todavía hay padres que se sienten derrotados por solo tener hijas y ningun varon a quien heredar un negocio, mis padres me crecieron en otra realidad formada desde mis abuelos en los que ambos trabajaban y como a mi no me han dicho lo que no puedo hacer, haré lo que me venga en gana hacer. Creo que la industria de Yucatán no es tan racista, el movimiento de equidad de género es muy sonado ya en las grandes industrias y la mujer empieza a ser propuesta en altos puestos a la par del hombre.

Nuestro futuro es que hombres y mujeres trabajen ya sea por desarrollo o necesidades económicas y se necesitaran mutuamente para la crianza de los hijos. Un reflejo de cambio en nuestra sociedad es al aumento de niños crecidos en guarderías o con los abuelos.

No sé cual sea mi futuro, pero espero poder decir que será bueno.

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